Balsas Salvavidas;
controversia en las revisiones
Según el reciente Real Decreto 339/2021 la balsa salvavidas
ha de ser revisada en plazos marcados por el fabricante.
Para otros países de Europa suele ser de 3 años, pero...
para España podrían continuar los 12 ó 24 meses. |
Aunque
las balsas son las mismas y sólo cambia el "empaquetado" exigido por
la DGMM, es posible que los fabricantes indiquen que van a seguir
manteniendo una duración inferior a la del resto de Europa. ¿Cómo es esto posible?
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El
ultimo Real Decreto RC 339/2021 se salta a la torera el Derecho
Marítimo Internacional y Europeo, se salta la Constitución
Española y el
Código Civil Español. Además incrementa las sanciones y complica
sin resolver, asuntos tan demandados como las revisiones de las
balsas salvavidas, a pesar de las buenas intenciones respecto a la
periodicidad de tales revisiones.
Nos
parece claro que la razón última, para que pudieran mantenerse revisiones
inferiores a las del resto de Europa, son únicamente los intereses económicos que
dimanan de tales revisiones. Y el error radica en la exigencia por
parte de la DGMM, de pedir un empaquetado diferente al del resto
de Europa.
Dinero manda.
Es la
eterna y triste realidad. En cada revisión para balsas Españolas,
los fabricantes obligan a que compremos un "certificado" (que años
antes no existía y cuya justificación es más que dudosa) y que no
es más que un "impuesto revolucionario" admitido de común
acuerdo por
todas las partes implicadas, menos naturalmente los sufridos
aficionados.
En
cada revisión los fabricantes venden también una funda estanca
para sellar el conjunto al vacío. Es lógico y de gran utilidad,
pero no es presentable que el costo de una bolsa de plástico sea
tan extremadamente elevado. En cada revisión los fabricantes
de balsas suministran y facturan a través de las estaciones de revisión, otros materiales que caducan a pesar de que
en muchos casos podrían seguir siendo válidos…
De
modo que dicho y hecho. Si la DGMM dice ahora en este RD, que los
periodos de revisión son los indicados por los fabricantes, pues
los fabricantes se apoyan mutuamente para mantener un ciclo de
revisiones en tiempo inferior al resto de Europa ¿Les suena esto a
lobby?
Spain is different
¿Por
qué en España las cosas parecen caducar más rápidamente que en
Italia o en Francia? La respuesta apuntada hace referencia al
clima español… más "pernicioso"... al de nuestros países vecinos.
¿Se lo creen?
Que
el material de seguridad tenga que ser revisado, es de cajón, pero
que nos intenten convencer que en Marsella las balsas sufren menos
que en Valencia, o que la Bretaña francesa es más húmeda que la
Galicia española… ¿tiene sentido?
Y ya
que hablamos de Francia, incluso en este país vecino existe
controversia respecto a las revisiones de las balsas a efectuar
cada 3 años. Lo cierto es que existe un informe en el que se
dispararon 15 balsas salvavidas y las diferencias en
funcionamiento dan mucho qué pensar, en relación a las revisiones
de las balsas. En resumen; Cuidado con el tipo de balsa que
adquirimos, y ojo a quién encargamos las revisiones, que a veces
dejan que bastante que desear, mientras que otras parecen ser más
seguras.
El informe Francés
A
pesar del “reducido” número de balsas disparadas (unas 15), los
resultados son preocupantes y dan bastante que pensar… En la
experiencia participaron importantes periodistas de conocidas
revistas de náutica, navegantes de altura, antiguos
miembros responsables de la Comisión de Seguridad y del Consejo
Superior de Navegación de Recreo Francés, un miembro de la
Gendarmería Marítima, buzos y regatistas, en fin, gente del
sector, transparente y sin vinculaciones y sin intereses con
fabricantes o estaciones de revisiones.
El
informe de más de 20 páginas, podría resumirse en el siguiente
párrafo con sorprendentes conclusiones.
Una
vieja plastimo de 40 años jamás revisada, es la que mejor se
comportó a pesar de no tener toda la presión en su botella de CO2
… Alguna balsa recientemente revisada ni siquiera se hinchó, y
aunque sí lo hicieron el resto, casi ninguna aguantó bien hinchada
más de 24 horas... Alguna, al cabo de 30 minutos quedó flácida
como un guiñapo. La mayoría de los hinchadores de goma (que a
tenor de lo expuesto parecen ser herramienta fundamental para el 'Grab-Bag') no
funcionaron. Una de ellas reventó por su válvula de sobre-presión.
Los botecitos de cola de contacto de casi todas estaban
inservibles y sin posibilidad de reparar el más mínimo pinchazo.
Una balsa se infló de forma retorcida como si fuesen las alas de
una mariposa, al haber sido mal plegada durante la última
revisión. Lo cierto es que el informe es muy ilustrativo y por
ello dejamos copia en su versión orinal (Ver Informe Francés).
El contenido de la balsa
Varía
entre homologaciones y la calidad de este 'armamento' varía entre
las diferentes marcas, pero en general deja mucho que desear. Cuestión de costes y precios de competencia.
Por ello
desde siempre hemos aconsejado el uso de la bolsa de emergencia
conocida por los anglosajones como “Grab-Bag”, que podríamos
traducir como por bolsa para “arramplar”. Personalmente prefiero
llevar dos unidades; una con los elementos de seguridad
complementarios jamás vistos en balsas, como son la VHF
portátil, con pilas de repuesto por supuesto, el kit de pinchazos
“pro”, un kit de pesca de "verdad", agua dulce, crema protección
solar, botiquín serio, etc… y una segunda bolsa tan a mano y fácil
de coger como la primera, que nos hará la vida de náufrago
mucho más llevadera, con mucha agua dulce y raciones de comida de
las buenas. Pero veamos el contenido de las balsas que solemos
encontrar.
Cuchillo
flotante: En todos los casos bastante "malucho". Como tengamos
que despiezar con él un atún recién pescado lo llevamos
"clarinete"... Cortar un cabo de cierto grosor puede resultar
tarea imposible.
Balde de achique y esponjas: En algunas balsas del informe
francés, el plástico estaba estropeado por la presión y
deformación por el vacío. Las esponjas todas Ok.
Remos flotantes: De juguete y muy cortos. Es necesario
agacharse hasta casi caer por la borda de la balsa para poder
remar desde el interior. Pero al menos pueden valer como plancha
para cortar un salchichón si lleva un cuchillo de verdad, y si tiene la
buena ocurrencia de llevar el Grab-Bag número 2 aconsejado.
Kit de pinchazos: Un desastre. Los botecitos de cola ni duran
ni valen para nada. Añadir uno de verdad al Grab-Bag parece muy
juicioso.
Hinchadores: Situación más que preocupante. La mitad de los
hinchadores de goma simplemente han sido deformados por la presión
del embalaje y NO funcionan. Incluir en el Grab-Bag.
Bengalas y cohetes: No tienen sentido. La tecnología actual
permite cambiar totalmente de tecnología. LEDs de alta potencia.
Más adelante comentamos algunas experiencias sobre su uso.
Silbatos y espejo de señales: A veces se encuentran mejores en
las bolsas de chucherías. Un juguete que debería ser mejorado
o mejor sustituido. Los espejos… pues valen…
Linterna estanca: Según el informe francés un 20% estaban
estropeadas. La mayoría con baterías en mal estado (Mala calidad
de las pilas). Todas las linternas son "baratas" y con aspecto de
las del "chino" del barrio. Si se monta usted un buen
Grab-Bag,
acuda a una tienda de buceo y compre una linterna estanca de verdad
de tipo LED de
alta potencia lumínica. Y además sabremos que tenemos un back-up
en el barco en caso de ser necesitada.
Raciones para comer y beber: En general en buen estado. Pero
como tengamos que pasar más de 24 horas como náufragos, lo vamos a
pasar muy mal. De nuevo acuda a la solución con un Grab-Bag nº2.
Botiquín primario: Patético y sin comentarios. Mejor intente
no tener que usarlo. Tijeras que no cortan, contenido sin utilidad
real… Haga el suyo propio y llévelo en el Grab-Bag n1. Es buena
idea conseguir un envasador de cocina al vacío que puede encontrar
por poco dinero en centros comerciales y con el cual podremos
envasar al vacío nuestra propia selección de fármacos. De nuevo
nos puede valer de Backup en el barco, en el caso de perder el
botiquín principal.
Algunas conclusiones
Vaya
por delante que afortunadamente sólo tenemos alguna aislada
experiencia en disparar balsas. Sin embargo si he podido verlas
por dentro, y comprobar su equipamiento. He sufrido lo indecible
al llevarlas para las revisiones. He navegado unas cuantas miles
de millas confiando en ellas, aunque no de forma ciega.
En
navegación de crucero, y para mi tranquilidad de espíritu, casi
siempre llevo la embarcación auxiliar totalmente hinchada y lista
para ser utilizada al instante, "adosada" al espejo de popa.
Machete en la bitácora listo para cortar cabos. Siempre llevo un "Grab-Bag"
que reviso y controlo cuando quiero y que además me vale como
backup para otras posibles situaciones de emergencia.
Tenga
presente que la balsa en la que Alan Bombard se convirtió en
náufrago voluntario para cruzar, sin ninguna reserva de agua
dulce, todo el Océano Atlántico, no era la típica BIB que todos
conocemos. Al contrario, era una auxiliar de tubulares como la que
todos utilizamos en nuestros barcos para bajar a la playa, dotada
de una lona de cobertura y un pequeño mástil con una pequeña vela.
Pensemos detenidamente en estos importantes detalles…
He
revisado la lista de materiales que las balsas llevan dentro. De
juguete en muchos casos. No soy pescador pero no hay que ser un
lobo de mar para entender que los peces tienen que andar muy
despistados para morder los anzuelos de supervivencia que llevan
las balsas. Montese su propio kit envasado al vacío y guárdelo en
el Grab-Bag. Las linternas de pilas son baratijas, los remos
son tan cortos y pequeños que no es posible pensar que puedan
valer para algo útil. Barritas de alimento de sabe Dios qué.
Bolsitas de agua que de ningún modo van a ayudar mucho en
condición de naufragio…
Por
todo ello, sería del todo razonable, cambiar de "onda" y reglar
las revisiones en periodos más dilatados, (al menos los 3 años y
cómo en Europa)
dejando siempre a mano una "bolsa de emergencias" mucho más
completa, racional, funcional, revisada y siempre al día por
nosotros y SIN necesidad de abrir la balsa. Las revisiones serían
más baratas al no existir artículos que mantener y extraer de su
interior y la dilatación
de tiempo haría mucho más lógicas las revisiones. Pero todo esto
va en confrontación directa con los intereses de la industria.
¿Por
qué se siguen llevando cohetes de pólvora, con los que podemos
quemarnos, o quemar la balsa?, cuando existen soluciones LED muy
seguras, de altísima iluminancia, y que no caducan ni a tiros...
En muy pocas ocasiones he utilizado una bengala de mano y sí… ¡Me
quemé! Os aseguro que el quemazo que te hace es muy fuerte y te
deja con la mano inútil durante unos dolorosos días. Me ocurrió
probarla en
tierra y no quiero pensar si la hubiese tenido que disparar en el
mar, con quemadura y cayendo al interior de la balsa. Lo cual me lleva a la
siguiente pregunta.. ¿Por qué están prohibidas las pistolas lanza
bengalas que son mucho más seguras? ¿Es que aún quedan psicópatas
pensando que las vamos a utilizar como arma de fuego?
Tenga
presente que el contenedor de plástico protege la balsa mucho
mejor que las balsas en bolsa. Si es posible y aunque la balsa
vaya estibada en el interior, el contenedor rígido protege más. La
balsa sufre lógicamente con los cambios de temperatura y se vería
comprometida si llegara a estropearse la funda estanca que
protege el interior del paquete. El problema es que al
hacerse el vacío en el interior durante el empaquetado, todo queda
comprimido y las gomas como las del hinchador lo soportan muy mal.
Lleve uno nuevo SIN comprimir en su Grag-Bag.
Y
algo en lo que hasta ahora posiblemente no hayamos pensado añadir en la bolsa y a tenor de la experiencia parece
indispensable… Un kit de pinchazos que sea funcional. Un kit de
verdad con varios parches y un bote de cola en condiciones... y
reacondicionado, revisado y mantenido por nosotros mismos como
armadores que somos los interesados en mantenernos vivos en caso
de un infortunio. ¿No le parece?
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