No
es el futuro, es YA
Este
año 2018, 62 millones de personas han tenido que soportar desastre
naturales derivados del incremento de 1ºC. Como consecuencia de
esto, 35 millones de personas
han tenido que soportar inundaciones desastrosas. El huracan
Florence que contra todo pronóstico ha subido hasya Nueva York, ha generado
pérdidas por 14.000 millones de dólares. 1.600 muertos en las olas
de calor de Japón, USA y Europa. Kerala en la India ha soportado la
peor inundación de su historia conocida.
La NOAA
en Estado Unidos confirma que el Ártico ya ha perdido el 25% de su
masa de hielo y en Septiembre que es cuando año tras año el Ártico
está en mínimos de hielo, ha pasado de 16 millones de Km2 a solo 4
millones de Km2, y estos además son de espesor muy inferior al que
existía de media entre los años 1981 a 2010. Es aún peor, los 12
records de tamaños mínimos han sido medidos en los últimos 12 años.
La
bomba de Metano
Explosión en sentido figurado, pues a diferencia de una bomba que
explota en un instante, la fusión del Ártico se está consolidando
año tras año, mientras Rusia y Estados Unidos aprovechan la fusión
para pelearse por las futuras prospecciones petrolíferas que serían
viables en un Ártico sin hielos.
¿Pero
estamos locos? De lo que se trata es de convertirnos en una sociedad
de consumo cero en petróleo de aquí a quince o veinte años, so pena
de desaparecer como sociedad y de sufrir las peores calamidades que
aún no podemos imaginar en cuanto a desastre ecológico, ambiental y
climático que jamás haya conocido la humanidad. Y estos desastre
ecológicos van a pasar inmediata factura, en la caída libre y en picado
de las producciones agrarias, por tanto hambrunas y guerras,
desplazamientos masivos migratorios y caos mundial global.
Burbujas de gas metano
El
efecto Albero y el calor latente del hielo
Todos
sabemos que los hielos guardan mucho frío. Por eso los ponemos en
los vasos de refrescos, pues además de enfriar aguantan tiempo antes de fundirse.
Es
decir, para fundir hielo en la barrera de los cero grados, se produce un
fenómeno de resistencia a la fusión llamado "calor latente de
fusión". Para fundir hielo hay que calentar mucho y esta energía
aportada es la que permite al hielo cambiar de estado de hielo a
agua. El hielo actúa como un "regulador" del calor de enorme
eficacia. Pero cuando todo el hielo ártico esté fundido, el calor
solar será empleado de forma total en incrementar la temperatura del
polo, ya sin ninguna barrera de protección para detener este
calentamiento.
Peor
aún. El hielo refleja la radiación solar con una asombrosa eficacia.
Cuando no haya hielo el efecto "albero" hace que todo la radiación
sea absorbida en vez de reflejada, realimentando aún más el efecto.
La
fusión del hielo de Groenlandia va a hacer subir el nivel de los mares
inundando regiones costeras que producirán emigraciones forzosas y
desastres humanos sin parangón. La subida del nivel del mar
aumentará un 30% sólo por la dilatación del volumen del agua de los
océanos debido al incremento de la temperatura del agua. Es física
básica. Salinización de acuíferos, desertización de regiones
inmensas, inundaciones y pérdidas de vidas humanas, modificaciones
en el Jet-Stream y cambios drásticos en las regulaciones de
temperatura de las corrientes marinas.
Los
negacionistas, la des-información y la psicología humana
Cuando
la realidad que se nos viene encima es demasiado brutal, cuando
tenemos que recortar nuestro consumo de energía en un 90%, cuando lo
que hay que cambiar en el modo de vida es casi inviable, cuando el
esfuerzo social es insoportable, la psique humana prefiere negar la
evidencia.
A todo
ello hay que sumar que el descalabro social no se da en forma de un
cataclismo o un terrible Armagedón. Es un profusión de catástrofes
medioambientales cada año más recurrentes y paulatinamente mayores y
por tanto algo que debemos "encajar" año tras año. Cuando la clase
política de los diferentes países del mundo decidan "coger el toro
por los cuernos" ya será demasiado tarde. De hecho ya es tarde aunque
un cambio radical en la sociedad podría moderar lo que está por llegar.
Los
negacionistas controlan los medios de comunicación, pues son los que
tiene intereses económicos y controlan las sociedades. En USA el 28%
de la población continúa creyendo que el cambio climático es un
proceso natural, y otro 14% niega simplemente que exista nada que
pueda ser llamado cambio climático. El partido republicano insiste
en negar la mayor y acusa de alarmistas a GreenPeace, ONGs y otros
organismos internacionales. Algunos alarmistas como por ejemplo Peter Wadhams predijeron que el Ártico sería navegable en 2016, y
aún no lo será hasta dentro de una decena de años. Otros como Guy
McPherson predijeron en 2002 que la humanidad perecería en 2030, y
todo parece aún bastante normal, pero sin embargo, existen ingentes
cantidades de datos científicos que sin ser tan extremadamente
pesimistas, avisan con contundencia sobre lo que está ocurriendo y
va a ocurrir en las próximas dos décadas.
Los
Oceanos baten record de temperaturas
Efectos
catastróficos. Tenemos registros en las temperaturas de los mares
desde 1950. Este año 2018 ha sido el año más caliente desde entonces. Pero
2013 lo fue, y el año siguiente 2014 superó al 2013, y así año tras
año hasta los últimos datos medidos en 2018, batiendo 5 records
consecutivos. ¿2019? Aún no ha finalizado pero va camino de ello.
La
temperatura del mar es el mejor indicador del cambio climático, pues
los océanos absorben el 90% del calor resultante del efecto
invernadero. Los cambios en la temperatura del aire son erráticos y
por tanto la inercia térmica del agua marina, convierte a los
océanos en el mejor indicador. Y lo que los océanos nos cuentan es
tremendo. El calor absorbido por el mar como incremento de
temperatura frente a lo que absorbía de media en los años medidos
desde 1981 al 2010 es de 197 x 10 potencia 21 Joules (el julio o
Joules,
una unidad de energía).
Cinco Hiroshimas por segundo
Seamos
más descriptivos. El mar tiene ahora que absorber como consecuencia
del incremento debido al cambio climático, el equivalente al calor
generado por 5 bombas atómicas como la de Hiroshima ¡en cada
segundo! El dato proviene del "Journal Advances in Atmospheric
Sciences" y está firmado por diferentes científicos de la
universidad física de china y colaboradores de diferentes
universidades de otros países.
El agua
calentada se expande y abulta más y por tanto el nivel de los mares,
aún sin aporte por fusión de los casquetes polares crece un tercio
más de lo que corresponde al aporte del agua fundida. Para final del
siglo se incrementará en un mínimo de un metro de altura, generando
al menos 150 millones de desplazados por zonas inundadas.
Las aguas
más templadas generan mayores huracanes y tifones más potentes. Las
tormentas tropicales son ya más violentas. Pero la subida de los
mares podría ser mucho peor; Todo el agua contenida en los hielos de Groenlandia fundida y sin tener en cuenta los aportes de la
Antártida, harían que los mares subieran 7 metros de nivel cambiando
radicalmente la geografía en toda la faz de la tierra.
Países
como Kirivati, o Tuvalu en la Polinesia ya están desapareciendo bajo
las olas y sus habitantes buscan refugio en otras islas o se
desplazan a otras tierras.
Desaparición de la vida en el mar
Pero la
desaparición de la vida comienza por el mar. El calentamiento de los
mares está produciendo tremendos problemas a la vida marina. Los
corales están simplemente desapareciendo y ya se han blanqueado
(muerto) muchas de las más bellas barreras de coral del planeta. En
el coral ponen los huevos muchas de las especie de peces que al
crecer pueblan los océanos y por ello se prevén caídas drásticas en
las poblaciones y stocks marítimos.
Desde
1988 hemos emitido más CO2 que todo el CO2 generado desde 1.750 hasta
1.988, y si limitáramos a una cuarta parte la generación de
dióxido de carbono
emitido actualmente (dejando de emitir el 75% de lo que hoy
emitimos), aún así el incremento de la temperatura se elevaría de 2º
haciendo desaparecer el 90% de la vida marina en los próximos 20
años. Lo cierto es que en 2018, lejos de disminuir, hemos seguido
aumentando la emisión de CO2, aunque todo hay que decirlo, ha
aumentado poco respecto a las previsiones de aumento, de no haber
tomado ninguna conciencia ecológica mundial. Pero es que hay que
hacer que caigan en picado y esto es socialmente imposible, lo cual
nos conduce a los escenarios más terribles que estamos relatando.
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