Un buen barco a motor es el resultado armonioso de una buena carena
y un buen motor. ¿Un solo
fueraborda, o dos mejor? ¿Más o menos CVs? Elegir el peso
correcto, el montaje idóneo, la hélice más adecuada… Conozca la
mejor opción...
No es tarea sencilla y de una opción a otra pueden
producirse variaciones drásticas en las prestaciones y en los
resultados finales. También es de suma importancia la seguridad,
sobre todo cuando vas a recorrer miles de kilómetros con etapas que
en ocasiones se adentran considerablemente en la mar durante decenas
de millas náuticas. El consumo y por tanto el costo de la gasolina
es también de gran importancia. Veámoslo.
¿Uno o
dos motores?
Lo primero que tuvimos que decidir es, si montar un
único fueraborda o por contrario hacer una instalación doble con dos fuerabordas de por ejemplo 2x150 cv o incluso 2x200 cv, que es la
máxima potencia para la que está homologada la Cap Camarat 755wa.
Buscábamos prestaciones, pero sobre todo seguridad pues algunas
etapas serían largas y bien metidas mar a dentro en el Atlántico.
Cuando eliges una instalación doble hay que tener muy claro el peso
que estás poniendo sobre el espejo de popa y tan malo es pasarse
como quedarse corto.
Llevar dos motores parece en principio más seguro por
aquello de si te falla uno en la mar… Pero después de analizar la
situación en detalle y contrastar las diversas opiniones, nos decidimos por una instalación de un solo
motor pero de gran potencia. Es cierto que una mecánica siempre se
puede romper, pero del total de fallos que sufren los fuerabordas
actuales,
las probabilidades de fallo mecánico son mínimas. Cuando hay
problemas, estos provienen generalmente de filtros en mal estado, de
gasolina mezclada con agua procedente de la condensación en el
depósito, de un fallo hidráulico en la dirección,…
Por otra parte, a igualdad de potencia, dos motores
son siempre más pesados que uno único. Es importante destacar
que la Cap Camarat está pensada para poder instalar dos motores y por
tanto su popa debe llevar más de 300 kilos para que
adquiera el asiento correcto. En caso de montar menos peso en popa
es necesario lastrar la popa con planchas de plomo para corregir el
asiento incorrectamente aproado.
Con algunas motorizaciones
diferentes, la CapCmarat queda con el asiento muy aproado,
acumulándose agua en el suelo de la bañera hacia la zona de proa.
Seguridad Yamaha
La mecánica Yamaha
es tan eficaz como segura, fruto de su estudiado diseño y de la
enorme experiencia que da ser los más importantes fabricantes de fuerabordas del mundo. No en vano gran parte de los profesionales
del mar en todas las costas del mundo confían en esta marca en su
quehacer diario.
En las costas más remotas
del mundo entero es difícil ver otra marca de motores que no sea Yamaha.
En la imagen, pescadores en las costas del océano indico utilizan
exclusivamente Yamaha, como hemos podido comprobar en numerosas
ocasiones.
Lo importante es llevar un motor en perfecto estado y
efectuar un correcto mantenimiento. La instalación debe ser
impecable con filtro decantador de gran capacidad para evitar sustos
si llegara a entrar agua en el depósito de gasolina. Si consumimos
muchos amperios en nuestras instalaciones de servicios debemos
contar también con una doble instalación de baterías.
"...Nuestra experiencia no podría ser más
rotunda....
Cero problemas"
Estabilidad de ruta
El hecho de que un barco navegue de forma estable
depende sobre todo de su obra viva. Jeanneau deja claro su buen
“saber hacer” marinero con un comportamiento irreprochable de la Cap
Camarat.
Algún distribuidor nos aconsejó una instalación de
doble fueraborda por aquello de tener un doble empuje bien
equilibrado en el espejo de popa lo cual ayudaría a crear un empuje
firme y seguro.
Lo único cierto, como hemos podido comprobar a fondo,
es que con una motorización de un solo motor el barco navega sobre
raíles incluso a altísimas velocidades. Incluso en las cercanías de
los 50 nudos la estabilidad es perfecta.
Por otro lado el hecho de llevar a igualdad de
potencia dos motores, esto genera el doble de resistencia por llevar dos
colas y por tanto pérdidas de rendimiento y consumos más elevados.
Ajuste del trim
El F350 ofrece un ajuste de trim que permite subir y
bajar la cola con rapidez lo cual es de agradecer ya que además de
poder "afinar" la navegación, y por tanto navegar con más economía y
rapidez, conseguimos esquivar fondos cuando navegas por zonas muy
someras. Una vez en puerto el motor queda totalmente fuera de agua
aunque eso sí… por los pelos. Es muy probable que pudiéramos haber
montado el motor ligeramente más alto mejorando no sólo este aspecto
sino también el rendimiento general del motor al poder llevar un
menor ángulo de la cola sin trimar tanto a altas velocidades.
Creemos perfectamente posible conseguir de esta manera un par de
nudos más de velocidad máxima, sin descartar la posibilidad, que
habría que contrastar, de subir un poco más el paso de la hélice de
21 pulgadas por otra de mayores dimensiones como la inox de 23
pulgadas.
Consumo por milla
El
eje vertical muestra el gasto de gasolina por cada milla recorrida.
Vemos que este gasto se hace mínimo al llevar un crucero entorno a
los 24 nudos logrando un consumo mínimo de 1,4 litros por cada milla
recorrida. En el rango de velocidades comprendido entre los 20 y los
28 nudos conseguiremos los cruceros más lógicos.
La
primera parte del gráfico muestra unos altos consumos hasta que se
asienta un buen planeo a partir de los 14 nudos. Por encima de los
35 nudos el consumo por milla sigue creciendo hasta alcanzar los 3
litros /milla a tope de velocidad. El pequeño descenso del final del
gráfico corresponde al ajuste final del trim a alta velocidad con lo
que se consigue aumentar la velocidad máxima hasta los 50 nudos sin
aumentar más el consumo.
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Peso y potencia
¿Demasiado motor para una Cap Camarat 755? De primeras dadas así
podría parecer, pero a la postre el Yamaha F350 ha demostrado ser la
motorización perfecta. ¿Por qué?
Los 50 cv extras ofrecidos por Yamaha frente a otros motores
fueraborda de 4 tiempos se traducen en 90 kilos más de peso, lo cual
pudiera parecer a priori exagerado. Pero si lo analizamos con más
detalle observaremos que la potencia representa solo una parte de la
ecuación final. Los 5.300 centímetros cúbicos y su configuración V8
generan un par motor demoledor. Par motor, es decir, fuerza en la
hélice se traduce en un galopar salvaje hacia velocidades que
parecen no tener fin. El motor estira hasta límites insospechados. A
medida que trimas correctamente vas ganando en revoluciones y
creciendo en velocidad hasta los 50 nudos (gps).
Después de cada etapa se impone una
limpieza tanto del motor como del barco. La manguera se puede
conecta a la toma de alimentación de agua del mar para limpiar en
pocos minutos el circuito de refrigeración del motor.
El
F350 de Yamaha produce según los estudios en bancada un 45% más de
par motor que un fueraborda V6 de 250 cv. Y esto es mucho más que
simple un dato analítico. En las diferentes pruebas efectuadas
siempre sobre una Cap Camarat 755wa, la velocidad alcanzada en las
mismas condiciones de mar fueron con un fueraborda de 250 cv de
“sólo” 39 nudos, frente a los demoledores 50,1 nudos con el F350.
El
tramo en azul muestra la mejor economía del Yamaha. Entre los 14 y
los 28 nudos de crucero el gasto se mantiene entre unos moderados 30
y los 35 litros/hora. La reserva de potencia que guardamos bajo la
manga es descomunal.
Prestaciones de infarto
Impresionante. La Cap Camarat pasa al planeo en torno
a los 15 nudos y en pocos segundos. Entonces cortas a la mitad la
palanca de gas para mantenerte en un crucero rápido de 25 a 30
nudos.
Y ahora viene lo bueno… Cuando en un barco normal
estas ya acercándote a la zona “prohibida” en donde cada vez cuesta
más arrancar algún nudo al GPS el Yamaha F350 tiene todavía fuelle
para rato.
¡Mejor aún! Llevando el barco a 20 nudos mientras
recibes una atractiva brisa en la cara y una relativa sensación de
buena velocidad, la Cap-Camarat acelera de 20 a 40 nudos con un brío
y alegría mucho más intensos que de 0 a 20 nudos. La aceleración se
hace notar con más intensidad en esta segunda zona de velocidades
que parece no tener fin. Efectivamente ahora entramos en la
verdadera zona “adrenalina”… El barco sigue cogiendo velocidad a
medida que avanzamos la palanca electrónica y vamos tirando arriba
el trim del motor hasta límites en los que parece que vayamos a
despegar. 47, 48 nudos ahora si parece que estemos rozando el
límite. Trimamos algo más y dejamos que el misil coja más velocidad
y vuele bien bajo acariciando la superficie del agua. Alcanzamos 49
nudos, 49 y medio…. 50 nudos de GPS!
En la pantalla
del GPS portátil podemos comprobar como registramos los 50 nudos de
velocidad máxima que alcanzamos sin contemplaciones en el interior
de la ría de Vigo. ¡Bravo!
El
F350 de Yamaha estira sin parar hasta los 50 nudos de velocidad.
Velocidad de misil con los tanques casi
llenos y 4 personas a bordo. Es posible que pudiéramos conseguir
algún nudo extra probando una hélice de 23 pulgadas y subiendo
algo el motor o utilizando un “power lift” para afinar aún más la
altura de la cola.
Yamaha F350
5,3 Litros, 8 cilindros en “V”, 362 kilos de
peso
El pasado año Yamaha sorprendió al sacar al
mercado su nuevo motor V8 de 350 caballos de potencia. 5300
centímetros cúbicos y 32 válvulas para que el gas respire a
pleno pulmón en sus cámaras de explosión. Los avances técnicos
del motor son de primer orden y encontramos árboles de levas
que avanzan o retroceden el momento en que se abren y cierran
las válvulas en función de las revoluciones del motor. De esta
manera se optimiza el rendimiento y por tanto el consumo de
gasolina para cualquier régimen de giro. El ajuste del
“timming” en los árboles de levas es algo corriente en los
mejores motores de la industria del automóvil y consigue
mejorar el par motor especialmente en las bajas revoluciones
justo donde más falta hace para lograr arrancadas fulgurante.
Incluso en
régimen de crucero el YAMAHA se mostró muy silencioso. Hasta
para dejar dormir a pierna suelta a los más pequeños invitados
a bordo.
El Yamaha F350 es tan silencioso al ralentí que
puedes llegar a pensar que se ha parado. El cambio si es un
poco ruidoso pero bien sincronizado al solicitarse de forma
electrónica y no supone ningún problema a pesar de tener que
hacer múltiples maniobras en puerto. Cuando aceleras escuchas
un sonido ronco y seguro resultado de su único doble colector
de gases que une los escapes de sus espectaculares culatas en
V8.
Decenas de avances tecnológicos están
integrados en el F350 en donde se han sobredimensionado todos
los puntos que han de soportar mayores desgastes y tensiones
como el montaje de motor, rodamientos bien dimensionados en la
transmisión, y doble alimentación al circuito de
refrigeración. El resultado es tan perfecto que los
indicadores digitales de temperatura y presión permanecieron
exactamente en su medición correcta durante todo el recorrido
del RideSea.
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