Pero lo malo es la durabilidad. Un
panel flexible está formado por un sandwich cuya cara superior que
recibe los rayos de sol es de un plástico transparente que se puede
pisar y es estructuralmente resistente. Pero la radiación
ultravioleta acaba con todo tipo de plástico degradando el polímero que
finalmente amarillea y reduciendo las prestaciones hasta hacerlo
inútil. ¿Cuánto tiempo? Depende pero puede contar unos 10
años de media.
Mientras tanto los paneles solares
rígidos están construidos en su parte superior por un cristal
templado que es sencillamente eterno. Utilícelos para cubrir biminis,
el techo de un HardTop, y crear espacios sombreados en popa o donde
se le ocurra poderlos instalar.
El conexionado y las sombras
Si emplea más de un panel, lo cual es
más que aconsejable, surge la duda… ¿Los cableo en serie, o en
paralelo? ¿Todos en serie o en grupos de dos o tres que a su vez vayan en
paralelo? No es objeto del presente artículo, pero conviene indicar
que si sólo una pequeña parte del panel entra en sombra, todo ese
panel reduce drásticamente su producción de energía y no de forma
proporcional a la parte que ha entrado en sombra.
En un barco con la vela mayor, con el
génova, escorando, con el movimiento y los cambios de banda, y las
toallas de la playa tendidas en cualquier parte, y el kayak inflable
estorbando por la cubierta, el asunto de la sombra sobre los paneles
es algo que debemos tener presente.
Si hemos montado paneles en serie, el
rendimiento del conjunto puede caer mucho. Según este planteamiento
sería más que conveniente el montaje en paralelo. No caerán lo
amperios más que en el panel afectado y trabajaremos perfectamente
con el resto de paneles bien iluminados. En el montaje en paralelo
tendremos bajas tensiones lo cual exigirá secciones de cobre más
importante hasta el regulador. ¿Qué es mejor un regulador de gran
potencia o varios pequeños cada uno para su panel? ¿Es mejor a pesar
de todo, cablear los paneles en serie como se hace en las grande
instalaciones fotovoltaicas?
Regular con MPPT
Todo lo anteriormente planteado está
muy relacionado con el tipo de regulación que utilicemos en la
instalación fotovoltaica de nuestro barco. La cosa no es complicada,
aunque tampoco trivial. Intentemos dar una pincela de luz sobre el
asunto, aunque el tema sea suficiente como para dedicar un artículo
de forma exclusiva.
En los últimos años han aparecido un
nuevo tipo de regulares llamados MPPT (por aquello de “Maximum Power
Point Tracker”, o lo que es lo mismo; Seguimiento del Punto de
Máxima Potencia). ¿Pero qué es esto? ¿Y por qué es necesario montar
un regulador en la instalación solar de mi barco?
La corriente que entrega un panel
solar de 12 voltios en vacío (o sea funcionado sin carga) no es ni
mucho menos constante. Este panel puede entregar a máxima luz solar
del mediodía y dependiendo del fabricante hasta, pongamos, 22
voltios, lo cual podría "freír" el parque de baterías, especialmente
si tuviéramos unos cuando paneles montados en paralelo, que sumaran
muchos amperios de carga. El regulador se encarga de “recortar la
tensión desde los 22 a los 13,6 voltios idóneos para cargar el
parque de baterías.
En un regulador normal conocidos como
PWM por aquello de (“Pulse Width Modulation” o modulación por
anchura del pulsos) de los que había hasta ahora, la diferencia de
tensión desde 13,6 a 22 voltios que son más de 8 voltios, se pierde
desaprovechando una parte importante del rendimiento del panel
solar, especialmente cuando este puede rendir más a pleno sol del
medio día. Esto no ocurre con los reguladores MPPT que transforman
toda la tensión, por alta que esta sea, en el voltaje idóneo pero
aumentando la intensidad, o sea al final, entregando más potencia.
Y la diferencia es muy, pero que muy
sustancial, que no ya en precio, pues los reguladores MPPT han
bajado tanto de coste en los últimos años como los paneles. En
conclusión y como colofón hasta que publiquemos el artículo dedicado
a los reguladores solares idóneos para nuestro barco, quédese con
este mensaje. Monte un regulador MPPT sea cual sea el cableado que
decida montar tanto en serie o como en paralelo, para su
configuración de paneles solares.
Un generador portátil de
gasolina
Durante años he llevado en el barco un
pequeño generador de un kilowatio, de los portátiles que utilizan
los tenderos en los rastros para alimentar sus puestos callejeros.
Se trata de un pequeño generador de último sistema de backup y en
caso de emergencia total… Me explico.
Siempre me obsesionó la idea de, por
culpa de un despiste en el uso abusivo de la nevera, la música, los
cargadores las luces que aún eran halógenas, y demás cacharros,
pudiera cepillarme la capacidad del parque de baterías de servicio,
que también por despiste en muchos casos, queda conectado en
paralelo con la batería del motor de arranque. En este caso me
imaginaba agobiado en cualquier lejano rincón del mar sin poder
poner en marcha el motor principal. Dicho sea de paso, por entonces
no tenía paneles solares montados en el barco.
En definitiva, el generador portátil
es barato, hace un ruido aceptablemente moderado si hemos comprado
uno de cuatro tiempos frente a los más económicos de 2 tiempos que
son bastante peores. Pueden entregar unos 30 amperios a 12 voltios
para recuperar la carga de un parque de baterías agotado y consumen
poca gasolina. He viajado durante casi 20 años con él sin ni
siquiera retirarle los precintos de nuevo, pues era de backup. En
ninguna ocasión lo he tenido que poner en marcha…. Pero siempre ha
estado allí estivado en un oscuro tambucho para mi tranquilidad de
ánimo.
El generador diesel
Ya hemos comentado que lo mejor son
las energías renovables, pero es cierto que en barcos de más de
14 metros y si estos ya tienen instalaciones de aire acondicionado o
equipos de gran consumo como por ejemplo compresores para botellas
de buceo, el generador diesel es casi imprescindible.
Aunque consumen menos que el motor de
propulsión, siguen tragando litros de gasoil al día, y por ello
debemos hacer números y calcular bien la capacidad de nuestros
tanques de combustible.
En conclusión…
Solar sin lugar a dudas. Hay quien
opina que el piloto automático traga demasiados amperios y que es
mejor montar un piloto de viento. Es una opinión… Sin embargo
pensamos que es mejor invertir el dinero que cuesta un piloto de
viento en una mejora de la instalación fotovoltaica en el velero.
Encima del bimini caben fácilmente 400
watios y si montamos unos pescantes estos pueden llevar también
paneles con más potencia. En un velero de 12 a 14 metros no es demasiado complicado
encontrar sitio para un montaje que se acerque a los 600 watios, o
aún más si nos esmeramos en localizar espacios en la cubierta.
Es sumamente importante hacer números
y conocer a cuanto sube nuestro consumo diario. Con ello podemos
calcular la cantidad de watios necesitados y dimensionar también el
parque de baterías de forma acorde con la potencia media consumida a
diario en nuestro barco.
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