Al navegar por
la noche nos ayudará el tener identificados determinados puntos
especialmente importantes como son, por ejemplo, los ‘stoppers’ a
donde va a parar una parte importante de la maniobra o algunas
marcas para conseguir un buen trimado.
Incluso
estando en puerto amarrados, también es útil poder identificar en la
oscuridad algunos elementos del barco, como por ejemplo, la toma de
corriente y la sobre todo la orientación del conector sin tener que
luchar por poder introducirlo correctamente en la base. Resulta más cómodo
identificarlo de un simple vistazo, que tener que encender la linterna para
buscar la forma en la que encaja en el dichoso conector.
Si marcamos algunas
zonas del barco con la cinta fotoluminiscente, localizaremos
rápidamente la zona o la forma de una pieza en la oscuridad total y
por ello puede sernos útil en la identificaciones de lugares
concretos.
Hay quien
también utiliza algunas tiras de este tipo de cinta para identificar
su plaza de amarre en el pantalán, o para encontrar una boya o el
extremo de un cabo, aunque para esto debemos retractilarlo con un
poco de manguito termoretráctil transparente que proteja la cinta
fotoluminiscente.
En el interior
del barco
Estas
cualidades la hacen perfecta para ser utilizada como puntos de
identificación en el interior de barco. Por ejemplo para indicar
dónde está la maneta de la puerta del cuarto de baño y poder hacer
la visita nocturna al baño sin tener que deslumbrarnos al encender
la luz.
En concreto,
la identificación mediante un pequeño círculo nos fue de gran ayuda
en nuestro barco para marcar la posición en que deben estar las
palancas de conexión de los parques de las baterías, normalmente
escondidas detrás de un panel en donde suele reinar una profunda
y pertinaz oscuridad. Otro sitio interesante en donde ayuda un punto
fosforescente es en los enchufes que a veces cuesta localizar cuando
estamos leyendo en la penumbra del salón.
La cinta puede
recortarse fácilmente con unas tijeras en forma de punto luminoso, o
incluso en forma de pequeña flecha para indicar una dirección en la
que debe encajar algo. Pero también puede ser útil para marcar los
bordes de una escalera que bajan a un sitio de estiba de velas, o
para indicar la forma en que gira el cierre de la maneta de un
tambucho.
Las
posibilidades son amplias y quizás este tipo de cinta pueda
ayudarnos a buscar una solución efectiva a un problema antiguo y
concreto que tengamos para localizar algo del barco cuando falta la
luz.
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