El GPS y los Chartploters hacen de la navegación un sencillo
juego de niños. Por seguridad debemos llevarlos a bordo, pero lo
cierto es que son muchos los días en los que al navegar incluso
olvidamos quitarle la tapa. Decorativo pero necesario por
seguridad y sin el cual nuestro barco parecería desmerecer.
De la
misma forma que casi nos hemos olvidado del compás, jamás se nos
ocurriría salir a navegar sin un Chartploter con su
correspondiente cartografía digital. La instrumentación digital
te sitúa en todo momento en la posición exacta de la cartografía
en mitad de la pantalla, y de esta forma es inmediato saber
decidir el rumbo que debemos hacer para alcanzar nuestro destino
o hacia donde debemos dirigirnos para pasar con suficiente
franquicia por algunos bajíos o pasar un
cabo. ¿Verdaderamente necesitamos un compás si llevamos
una buena instrumentación digital?
Y sin embargo
el compás es necesario
Aún siendo
cierto que son casi obsoletos debido a los instrumentos
electrónicos, es igualmente cierto que la brújula es el
primer elemento de seguridad que debemos llevar en el barco o en
una balsa salvavidas.
Al navegar
solemos con frecuencia verificar el rumbo que indica el chartploter con el del compás. De esta manera te aseguras que
ambos funcionan correctamente. La forma circular del compás
también ayuda a calcular rápidamente la dirección de donde llega
el viento sin más que mirar su superficie esférica, o
interpretar rápidamente el rumbo por el nos alcanzan los frentes
de olas. Y esto es importante para conseguir una navegación
segura, ya que podremos deducir el mar que nos espera tras pasar
un cabo o que tipo de navegación habremos de hacer.
¿Cómo
aparecieron los compases?
La brújula
o compás es capaz de indicarnos la dirección de un campo
magnético. Y como nuestro planeta tiene un campo magnético, la
aguja de la brújula se orientará siempre en la misma dirección,
que actualmente se encuentra a una buena distancia del polo
norte, y es conocida como el Norte magnético.
Los
marinos de antaño se dieron cuenta de las posibilidades de
orientarse con una brújula. Con un buen cronómetro se podía
además calcular la coordenada de la longitud sin más que
observar lo tarde que amanecía o se ponía el sol respecto a la
hora que marcaba el cronómetro llevado a bordo. Para la latitud
se utilizaba un sextante que permite calcular el angulo que hace
el sol al mediodía.
Pero el
verdadero origen del compás sigue siendo un misterio. Los
griegos ya sabían sobre las propiedades de las “piedras”
magnéticas cientos de años antes de Cristo. Pero las primeras
referencias a tazones de agua en los que flota un pez de madera
que apunta al sur, provienen de la China del siglo XI. La
primera brújula con cierto parecido al actual proviene de la
Europa del siglo XIII.
La fiabilidad
de la sencillez
Está claro
que un chart-plotter formado por cientos de componente
electrónicos montados en una caja estanca y que depende de una
fuente de suministro eléctrico y de una buena recepción de las
señales de varios satélites parece bastante menos fiable que el
mecanismo de un compás, en el que sólo existe una única pieza
móvil que pivota libremente sobre un eje en mitad de un fluido
que actúa como amortiguador de movimientos.
En
contrapartida comentaremos que en un barco de navegación de
altura, navegamos comúnmente con dos chart-plotters que
funcionan en paralelo y además solemos llevar también otro chart-plotter
de mano alimentado con pilas. De esta forma estamos cubiertos
frente a posibles fallos en el sistema de baterías y por si
pudiera llegar a fallar una de las pantallas.
Con todo,
el compás es un elemento que por seguridad debe quedar en el
barco, de la misma manera que debemos conocer las nociones
básicas para orientarnos con él y unas cartas de navegación En
realidad es también necesario aplicar la variación magnética
debido al continuo cambio que sufre el norte magnético respecto
al que figura en la carta de papel, y el posible desvío del
compás por culpa de otros instrumentos metálicos o aparatos
electrónicos montados a bordo. Pero aún sin aplicar tales
correcciones la orientación básica con una brújula nos permitirá
una buena orientación y nunca perder “el norte”.
Artículos relacionados:
-
Instrumentación
básica
-
ChartPlotter a
fondo
-
Navegar con
CharPlotter o cartas
-
ChartPlotter ¿para
cuando el futuro?
-
¿Cómo mide las
distancias y las posiciones un GPS?