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Los motores
Diesel son generalmente robustos y fiables razones más que
suficientes para que confiemos en ellos como fuente de energía y
propulsión para nuestros barcos. Pero debemos cuidarlos y
mantenerlos correctamente para que duren muchos años pero sobre todo
para que estén siempre listos para ser utilizados cuando sean
requeridos. Con algunos pocos conocimientos podremos atender el
mantenimiento básico pero importante del motor y resolver un gran
número de posibles averías.
Muchas de
ellas provienen del sistema de alimentación de combustible. Si en el
tanque de combustible hay algo de agua o partículas en suspensión
estás pueden obstruir el filtro o el separador de agua, deteniendo
el motor. Por ello es muy importante mantener limpio el combustible
y cargar tanques en sitios que ofrezcan garantías. Cuidado pues
cuando navegue por aguas de países desconocidos. En Cuba por
ejemplo, en cierta ocasión nos vendieron combustible mezclado con
agua y claro el motor se paró al cabo de unas horas
Existe un
nuevo combustible diesel ecológico a veces llamado SuperDiesel o
EcoDiesel, no siempre fácil de encontrar, que tiene menores niveles
de azufre y por tanto es más limpio para el medioambiente al
reducirse en la combustión los niveles de sulfuro emitidos a la
atmósfera. Es justamente este sulfuro el que al reaccionar con el
agua produce ácido sulfúrico y crea la tan famosa y dañina lluvia
ácida. Además este ácido saliente por el escape consigue oxidar y
dañar más rápidamente algunas partes internas del motor y
especialmente los codos y tubos de escape.
Pero ojo! Con motores antiguos o no preparados,
estos combustibles
ecológicos pueden dar problemas.
Los diesel con
más sulfuro lubrican mejor y tienen mayor índice de ‘Cetanaje’, que
es
el equivalente al octanaje en las gasolinas. Con un alto índice de
Cetanos, se consigue retardar la explosión del combustible y por
tanto los motores soportan mayor grado de compresión y por tanto
mayores rendimientos y potencia. Los motores diesel antiguos están
preparados para funcionar con diesel alto en cetanos. Los diesel
modernos pueden quemar también el nuevo biodiesel.
 Los aditivos
de sulfuro ayudan a la lubricación y por ello los motores antiguos
bombean más diesel a los inyectores del necesario con el ánimo de
lubricar, haciendo retornar el exceso de diesel al depósito de
combustible. En definitiva, si su motor es antiguo no utilice diesel
ecológico pues podría dañar el motor. Una solución es utilizar botes
de aditivos que mejoran la lubricación o aumentan los cetanos o
ambas cosas a la vez.
La humedad en
el combustible es causa de problemas. A veces viene de la gasolinera
del puerto ya que en sus grandes tanques subterráneos puede
acumularse humedad que al final acabará en nuestro depósito. Otras
veces es nuestro propio tanque que pasa el invierno casi vacío
dejando que se condense la humedad para dar finalmente agua en los
depósitos, que como pesa más que el diesel irá a parar a la parte
inferior del tanque de combustible. Si añade algún aditivo de vez en
cuando, es buena idea que contenga alguna capacidad de dispersión
del agua para que esta quede finamente mezclada con el diesel y
pueda eliminarse sin más problema con el funcionamiento del motor.
 Aunque le
pueda parecer mentira, el diesel es un buen alimento para distintas
bacterias y algas microscópicas que conseguirán transformar el
combustible en una gelatina opaca capaz de inutilizar el motor. Esto
ocurre sobretodo en los trópicos en donde en los casos más extremos
dejarán inservible el diesel en apenas una semana. Existen aditivos
con biocidas que matan estos organismos e incluso son capaces de
licuar el diesel si este no está muy estropeado.
Si su
puerto está en lugares muy fríos (especialmente en el norte de
Europa) puede ser conveniente utilizar algún aditivo para bajas
temperaturas que asegure la fluidez del diesel incluso en los climas
más inhóspitos. Debe saber que puede utilizar aditivos que efectúan
todas estas cosas a la vez, dispersando el agua, mejorando la
lubricación, aumentando los cetanos, eliminando los microorganismos,
y asegurando que con bajas temperaturas el diesel no se convierta en
una especie de miel imposible de quemar. Siga las instrucciones del
fabricante y añada justo lo que se aconseja, ya que en mayor
concentración no conseguirá mejorar nada gastando más dinero
inútilmente. Y cuidado al manipularlos ya que suelen ser bastante
corrosivos.
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