Cuando carga la racha, el
velero escora con fuerza, el timón se hace más duro y el barco
tiende a ir hacia el viento. Con la escora, mucha superficie del
timón sale del agua, lo cual nos resta capacidad de maniobra.
Debemos largar escota y reducir trapo.
Con la escora, los veleros tienden a ir hacia el viento, y existen
dos razones para ello. Lo importante es entender que en un casco
escorado la obra mojada o parte del casco que está sumergido,
cambia drásticamente respecto al que normalmente tiene el barco
adrizado en reposo y bien simétrico, y además la proyección vertical
del palo inclinado estará muy fuera del barco.
Efecto 1:
Cambio en la carena mojada
En
primer lugar se produce un cambio en el centro de
resistencia de la carena, que se desplaza un poco al escorar,
quedando hacia barlovento respecto a la situación normal de equilibrio.
A este efecto
también se le suma otro correspondiente a la asimetría del casco
mojado (carena) que produce una fuerza de sustentación. La parte del
casco del lado del viento toma una forma más ancha sobre todo en
popa, que el lado de sotavento y en definitiva las líneas de agua
tienen recorridos de distinta longitud, y distintas velocidades,
produciéndose una succión que hace tender el casco a orzar.
Efecto 2:
Cambio del centro vélico
En segundo lugar también cambia el centro de empuje vélico.
El efecto es muy importante cuando aumenta la escora, pues como el
palo está inclinado fuera del barco, la fuerza de empuje de las
velas también estará fuera del barco. La proyección vertical
del punto imaginario central de toda la superficie de nuestras
velas, o mejor aún el centro de empuje de nuestro plano vélico (que
con todo rigor no coincide con el centro de la superficie del plano
vélico, pues la sustentación de la vela no ocurre en su centro
geométrico de su superficie) queda situado fuera del barco. Esto
origina un fuerte par de fuerzas entre la resistencia de carenas y
el centro de empuje que tiene a aproar el barco con mucha fuerza.
A diferencia del
desplazamiento del centro de resistencia, el desplazamiento del
centro de empuje se hace muy importante a medida que aumenta el
ángulo de inclinación del barco. El par de fuerzas
tiende a pivotar el barco hacia la dirección del viento.
Debemos saber que en un velero, el plano vélico pierde mucho
rendimiento al escorar y por eso no debemos dejar que
escore más allá de los 20º con cascos mangudos o 25º a lo sumo si
tenemos un casco más fino y regatero.
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