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| Diciembre 2013 | Yogi. Megayate hundido | | | | ¿Cómo se puede hundir un megayate de 60 metros nuevo y en perfecto estado en menos de 5 horas? Con menos de un año desde su botadura, el megayate con nombre de oso y pabellón francesa, se hundió hace unos meses en aguas griegas y por causas aún confusas pero de las que bien se extraen algunas conclusiones.
El barco había estado navegando a 14 nudos de velocidad esa misma mañana de mal tiempo, lo cual pudo ciertamente generar algún problema que condujera al siniestro. Según los servicios de meteorología turcos las
condiciones reinantes en la zona amenazaban con olas de 7 metros y vientos de 40 nudos, aunque el servicio de meteorología francesa reconoce más bien olas no mayores a los 2 metros lo cual cambia mucho la situación.
Se produjo un problema de recalentamiento del motor de estribor posiblemente por una burbuja de aire en el circuito de refrigeración del motor como consecuencia de los fuertes cabeceos y movimientos debidos a la alta velocidad en la que navegaba el barco con mal tiempo.
El barco dedicado al charter de lujo estaba pilotado y gestionado por una tripulación de marineros franceses profesionales y en principio competentes. ¿Por qué se produjo entonces el hundimiento?
La parada del primer motor no hizo más que acelerar la caída del segundo que al cabo de poco tiempo se
recalentaba al trabajar a máxima potencia y estar sujeto al mismo tipo de problemas de refrigeración. Cuando el barco perdió la arrancada, los problemas se encadenaron sin cesar cuesta abajo hasta el triste final.
El Bureau d'Enquetes sur les Evénements de Mers, algo así como la oficina de informes de incidentes marinos francesa no aporta mucha luz sobre este caso y más bien parece querer ocultar alguna verdad. ¿Por qué no
funcionaron las bombas de achique? ¿Cómo pudo entrar tanto volumen de agua en un barco diseñado con mamparos estancos? ¿Por qué el AIS estaba apagado?
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