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| | Octubre 2011 | | La barbarie pirata continúa y se expande a otras regiones | | |  | | | Hace pocas semanas la Armada Española concluyó una impresionante operación de rescate en el Golfo de Aden cerca de Yemen, allá donde los piratas Somalíes campan a sus anchas y no paran de delinquir actos de piratería con asesinatos.
El matrimonio Francés que realizaba la vuelta al mundo en un Catamarán y se dirigía hacia Tailandia, cuando fue abordado por una lancha con 7 piratas. Christian Colombo de 55 años de edad y su mujer disfrutaban su
reciente jubilación y tras vender su casa adquirieron el catamarán para emprender la apasionante aventura de recorrer el mundo entero. Eran conscientes del enorme peligro que entrañaba cruzar estas peligrosas aguas plagadas de piratas, pero el riesgo parecía estar controlado.
El Tribal-kat un cata de 17 metros había navegado por el mediterráneo y tras atravesar el canal de Suez durante el verano, descendió por el mar rojo hasta llegar al golfo de Aden a principios de Septiembre. Una
fragata alemana recibe entonces una llamada de auxilio por el canal 16. El buque localiza el Catamarán vacío y a la deriva con Christian asesinado y da la alarma a todos los buques de guerra de la Unión Europea que patrullan tan extensa zona.
El buque de asalto "Galicia" de nuestra Armada Española, recela de una lancha detectada en su radar y dirige un helicóptero que inmediatamente sospecha que su esposa Evelyn, se encuentra secuestrada y escondida
en la lancha bajo unas mantas. A pesar del fuego enemigo de los piratas, los francotiradores de la Armada inutilizan con enorme pericia el fueraborda de los piratas. Los asesinos cambian el motor por otro de repuesto que es poco después inutilizado por otro certero disparo de la Armada. Entonces los piratas amenazan con asesinar a la mujer por lo que la Armada hunde la embarcación pirata y envía una neumática para recoger a los Somalíes esta vez naufragados y entre los cuales se encuentra la mujer francesa secuestrada.
Los malhechores han sido puestos a disposición judicial francesa avanzando hacia el fin de las limitaciones legalistas que tanto lastran la eficacia militar de las operaciones antipiratería. Son muchos los casos en los que
los piratas son devueltos a Somalia tras ser capturados. Ahora han sido entregados a la justicia francesa donde está asegurado el debido procesamiento y condena, tanto por secuestro como por el asesinato de un ciudadano francés.
También en el Golfo de Guinea
El secuestro por piratas de un petrolero de pabellón chipriota, a cuya tripulación hay cinco españoles,
representa el cuarto acto de piratería sufrido recientemente por marineros españoles. En 2008 el atunero Playa de Bakio con 13 españoles a bordo fue asaltado con lanzagranadas por 4 piratas cerca de Somalia se supone que hubo una negociación antes de la liberación de los secuestrados. En 2009 el atunero Alakrana de Bermeo con 16 españoles fue secuestrado por piratas somalíes a 400 millas de las costa de Somalia. Aparentemente el Estado negoció un rescate de 2,7 millones de euros para su liberación. Dos de estos piratas detenidos por la fragata Canarias fueron enviados a España en donde la justicia los condenó a 439 años de cárcel. En 2010 y al sur de las islas Comaras, dos tripulantes españoles a bordo del pesquero Vega5 son secuestrados junto con otros 22 tripulantes que son liberados por la marina India en Marzo de 2011.
Ahora le toca el turno al MattheosI, petrolero de bandera Chipriota con 5 marineros gallegos junto a otros croatas y filipinos, secuentrado a 60 millas de la costa en el golfo de Guinea en el Atlántico Africano. En la zona
proliferan bandas que asaltan numerosos barcos que transitan por la zona. La forma de actuar consiste en asaltos rápidos en los que robar la carga o el combustible, para revender la mercancía en el mercado negro de la zona. La región del Golfo de Guinea y del Sahel experimentan un fuerte auge de la piratería.
El apresamiento del buque tuvo lugar cuando la nave realizaba operaciones de descarga hacia un barco de otra compañía, a sesenta millas náuticas de la costa de Togo. Los secuestradores intentaron primero secuestrar
al buque de suministro, de mayor tamaño y de bandera noruega, pero los tripulantes de esta nave consiguieron repeler la acción. Seguidamente, los secuestradores se dirigieron al 'Mattheos I' y consiguieron hacerse con él.
Este nuevo secuestro con tripulantes españoles reabre la discusión sobre la protección de los barcos españoles. El secretario general del sindicato CIG-Mar, Xabier Aboi, ha criticado que no se permita la presencia de militares españoles en los buques, tal y como ya sucede con las naves francesas.
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