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| | Mayo 2007 | | Delfín enfermo es atendido por la Fundación Cram | | |  | | | Veterinarios y biólogos de la Fundación CRAM están atendiendo a un calderón gris que ha llegado vivo a la playa de la Almadrava en L'Ametlla de Mar (Tarragona). Le están proporcionando asistencia clínica para tratar de recuperarlo y devolverlo de nuevo al mar. Se trata de un hecho muy poco frecuente ya que la mayoría de estos animales llegan ya muertos. Se ha establecido un sistema de guardias para vigilar la evolución del animal
en las próximas 48 h.
En la noche del 17 de mayo un calderón gris, también conocido como Delfín de Risso, varó vivo en la playa de la Almadrava, cerca de L'Ametlla de Mar. Se trata de un ejemplar joven, una hembra de unos 2,7 m de largo. Es una especie típica del Mediterráneo -se estima una población de unos 6000 individuos en el Mediterráneo
noroccidental- aunque los avistamientos no son usuales debido a sus hábitos de vida lejos de la costa
Tras el aviso realizado por la policía local, la Fundación CRAM organizó el dispositivo de respuesta rápida integrada por los voluntarios de la Fundación formados para atender este tipo de emergencias. Los voluntarios de L'Ametlla de Mar han desplazado al animal, que presenta algunos cortes producidos en la zona rocosa en la que había varado, a otro lugar más seguro. Los voluntarios se han encargado de mantener al delfín en las mejores condiciones hasta la llegada de los especialistas. Una vez hecho el primer reconocimiento los veterinarios han decidido actuar "in situ" ante el estado de debilidad que presenta el delfín, lo que hace muy
arriesgado su traslado por tierra
Inmediatamente, el personal de la Fundación CRAM ha comenzado a controlar sus constantes cardio-respiratorias, a suministrarle un tratamiento anti-shock y una terapia de rehidratación oral. Además se le ha extraído sangre para realizar las distintas analíticas que traten de averiguar la causa de su enfermedad. Ante la previsión de que las condiciones del mar empeoren, el animal ha vuelto a ser trasladado a una playa próxima más abrigada. En ella, voluntarios de la Fundación CRAM junto con los técnicos han establecido un sistema de
guardias de 48 horas para controlar su estado de salud.
La causa de este varamiento aún no se conoce y habrá que esperar a los resultados de las analíticas. Sin embargo, sí que se sabe que en estos animales es relativamente frecuente encontrar un parásito que afecta a su sistema nervioso central y al oído, les produce desorientación y acaban varando, apunta Ferran Alegre,
director de la Fundación CRAM y veterinario que dirige el dispositivo de rescate
La Fundación CRAM es la entidad que realiza las tareas de rescate de animales marinos por delegación del Departament de Medi Ambient y Habitatge de la Generalitat de Catalunya. Además, este servicio está conectado al teléfono de emergencias 112 al que los ciudadanos pueden dar aviso de un animal marino
enfermo o varado en cualquier punto de la costa catalana
LA MUERTE DEL DELFÍN DE L’AMETLLA SE DEBIÓ A UNA PARASITOSIS
Los especialistas de la Fundación CRAM ya lo habían señalado como causa del varamiento
El estado de debilidad del animal hizo vanos los esfuerzos del personal de la Fundación CRAM que trabajó en todo momento apoyado por numerosos voluntarios. En el mismo día, se trasladó el cuerpo a Barcelona donde veterinarios y biólogos de esta entidad y de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona realizaron la necropsia. Los resultados confirman la hipótesis formulada por los veterinarios del CRAM
ya que el animal estaba infestado por parásitos que le habían atacado el sistema nervioso central
Nada más conocerse la noticia del varamiento entró en acción la Red de Voluntariado de la Fundación CRAM que permitió cubrir los turnos de vigilancia intensiva que eran previsibles en las 48 h siguientes. Inmediatamente, los integrantes de los turnos fueron llegando a la playa próxima al puerto de Calafat a dónde fue trasladado el animal porque, ante la previsión de un empeoramiento del mar, esta es más resguardada que la del Hospitalet
de l’Infant
El protocolo de la Fundación CRAM establece que lo más conveniente en estos casos es trasladar al delfín sin sacarlo del agua. Para ello y para mantenerlo en observación, los especialistas del CRAM utilizan una camilla flotante especialmente diseñada. Así se consigue reducir el estrés al que se le sometería al animal en el transporte por tierra y ayudar a su estabilización. Pero en esta ocasión no superó el estado semicomatoso en el
que se encontraba y murió en la mañana del sábado
Esa misma mañana, el cuerpo del delfín se trasladó al Departamento de Anatomía Patológica de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona, en donde se le realizó la necropsia. Allí se confirmó que era una hembra adulta, de 2,90m y 280 Kg. Además se identificaron los parásitos que ya habían sido señalados
como la causa más probable de la enfermedad por Ferran Alegre, veterinario y director del la Fundación
CRAM
En efecto, el nematodo Crassicauda grampicola (un parásito con aspecto de gusano), es ingerido por el animal en su alimentación, alcanza la zona del oído interno, perfora los tejidos adyacentes y daña el propio hueso craneal. Todo ello desencadena una inflamación en el sistema nervioso central con graves consecuencias para el animal: sufre desorientación, pierde el contacto con su grupo y termina por llegar a la costa en estado
semicomatoso antes de morir
El Departamento de Medi Ambient y Habitatge de la Generalitat de Cataluña es responsable de la asistencia a los animales marinos protegidos, labor que realiza a través de la Fundación CRAM. Este servicio está conectado al teléfono de emergencias 112 al que los ciudadanos pueden dar aviso de un animal marino enfermo o varado las 24 horas del día. La Fundación CRAM quiere agradecer públicamente la actuación del voluntariado que integra la Red de Respuesta Rápida ante varamientos. Esta red posibilita entrar en acción de
forma eficaz, en cualquier punto de la costa catalana desde el momento en el que llega la alerta
- El Calderón gris (Grampus griseus) también se conoce como Delfín gris o Delfín de Risso. Vive en grupos familiares de unos 25 individuos aunque pueden variar entre 15 y 40. Suele nadar alejado de la costa y en
aguas profundas, en donde se alimenta de calamares y distintos tipos de peces
- Otro tipo de calderones son los conocidos como “ballenas piloto”, que no tienen nada que ver con las auténticas ballenas. El caso más común es el de los Calderones comunes o negros (Globicephala melas), que en nuestras aguas son relativamente frecuentes. Las verdaderas ballenas son los cetáceos con “barbas”, que pertenecen al grupo zoológico conocido como misticetos (Mysticeti).
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