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| Octubre 2013 | Fuerabordas eléctricos de alta potencia | | | | La empresa canadiense Campion Marine junto con otra empresa de Florida han desarrollado un motor fueraborda eléctrico de 180 caballos basado en la cola de un motor Suzuki al cual se ha acoplado un potente motor eléctrico de corriente continua de 135 Kw.
El aspecto del motor es idéntico al de cualquier motor fueraborda de 4 tiempos salvo por los componentes que no tienen nada que ver con los de un motor tradicional. En su interior encontramos un motor sin escobillas de
400 voltios en continua junto con los componentes electrónicos de control necesarios y debidamente aislados.
El ahorro de peso es notable respecto a un motor de gasolina, sin embargo hay que montar en el barco al menos un conjunto de baterías de 300 kilos que sustituyen al depósito de combustible. Si no tenemos en
cuenta la cola, el peso del motor eléctrico es de solo 45 kilos, una cuarta parte del peso del motor de combustión interna.
El silencio es total y la sensación de potencia extraña al no aparecer ningún ruido que nos avise de la propulsión, aunque el manejo se realiza con una palanca en todo equivalente a la de cualquier motor con
avance hacia adelante o hacia atrás.
El par motor es constante y máximo para todas las revoluciones lo que logra un planeo en menos tiempo que con un motor de gasolina. En las pruebas realizadas en un barco de 7 metros el planeo se alcanza en solo 2,9
segundos, y se alcanzan las 30 mph en solo 4 segundos. La velocidad máxima conseguida con este motor en un casco de unos 6 metros y unos 1.000 kilos de desplazamiento alcanza las 50 mph, mientras escuchamos únicamente el aire en los oidos y el choque del agua contra la obra vida, pero sin ningún ruido de motor pues es totalmente silencioso. Las máximas revoluciones a las que la electrónica permiten hacer subir del vueltas al motor alcanzan las 6.000 RMPs. A ese régimen tocas la carcasa exterior y prácticamente no notas ninguna vibración.
Las baterías entregan 400 voltios sumando vasos de 3,2 voltios cada uno. Por esta razón se ha cuidado mucho el diseño del parque para que todo el circuito quede perfectamente aislado y sin posibilidad de
electrocuciones.
La autonomía es pequeña si la comparamos con un tanque de gasolina y sin embargo, nos permite navegar a 45 mph durante dos horas continuas, lo cual es más que suficiente para hacer salidas de día sin gastar un solo
euro en gasolina. El tiempo de recarga con un cargador estándar de 15 amperios a 220 voltios al enchufe es de unas 8 horas, de modo que durante la noche podremos dejar el barco listo para la siguiente jornada de navegación. Con un cargador con corriente trifásica y 330 voltios, el tiempo de carga puede reducirse a solo 20 minutos!
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