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| Febrero 2011 | Hotel Nautilus | | | | Imagine un hotel flotante con forma de nautilus gigante, como si de una descomunal arca de Noe se tratara. Se trata del Ark, fruto del estudio de arquitectura del arquitecto ruso Alexander Remizov destinado a ser un hotel submarino totalmente sostenible de unas 14 hectáreas de superficie capaz de albergar a 10.000 inquilinos.
Ha sido ideado en colaboración con una empresa de ingeniería alemana y el científico moscovita Lev Britvin.
Para su construcción se empleará madera, acero,y Etileno. El objetivo es llegar a ser totalmente autosuficiente energéticamente. Para ello el complejo estará dotado de paneles solares y energía eólica. Podría ser construido en sólo 3 ó 4 meses y en cualquier parte del mundo.
El Ark recuerda a la nave submarina de la película del capitán Nemo del año 1954, con Kirk Douglas como protagonista. Se parece a una ballena de vidrio y metal llena de paisajes boscosos en su interior, capaz de salir a la superficie y de sumergirse por un tiempo indefinido.
El Eco resort podría también ser construido en tierra, pero no especifica con claridad lo que podría ocurrir cuando el complejo tuviera que enfrentarse a los peores temporales flotando en el mar. La forma del domo está
pensada para crear una circulación natural del aire en su interior que produciría el movimiento de los aerogeneradores. En el interior se formaría un microclima adecuado para el crecimiento de los jardines.
Toda la construcción se podría realizar de forma prefabricada, modular, rápida y simple. La estructura es muy versátil y podría ser fabricada en cualquier parte para ser ensamblada a posteriori, contribuyendo de esta
manera a una importante reducción de costes. La cobertura transparente haría también las veces de recolector de agua de lluvia que sería canalizada a los tanques inferiores que darían estabilidad al conjunto. La estructura superligera emplearía elementos reciclados.
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