Las tonalidades del
mar son las más variadas que jamás hayamos encontrado en ningún
otro lugar del planeta. Desde cian puro, a tonos verdes esmeraldas y
azules ultramarinos. Cientos de tonos que contrastan a veces en
pocos metros de distancia.
Palau en
latitud
7°
30' Norte y 133° 30' Este,
disfruta un
clima tropical todo el año con una temperatura promedio anual de
27 °C y una humedad relativa bastante estable, en torno al 80%.
Las lluvias pueden ocurrir durante todo el año, aunque con más
probabilidad entre julio y octubre. De diciembre a marzo
prevalecen los vientos del primer cuadrante, y de junio a octubre
llega el monzón. El país está fuera de la zona de influencia de
los tifones siendo por ello una zona muy segura y protegida por
sus infinitos canales y pasajes entre islotes.
Sus islas de
origen volcánico son fértiles
y cubiertas
por espesos bosques. Las más grandes se
caracterizan por una selva de grandes terrazas y pastizales. En el
sur encontraremos bellísimos arrecifes de coral con una rica
diversidad biológica marina.
Navegar por sus
islas
El mar
ofrece una gama de azules y verdes tan rica y brillante que llegan
a parecer irreales. En broma comentamos que el entorno es tan
bonito que no puede ser real, que simplemente debe ser un enorme
decorado que han montado para impresionar a los extranjeros..… Los
contrastes entre las diferentes gamas cromáticas no dejan de
impresionar por mucho que sigamos saliendo a navegar día tras
día.
Las
caprichosas formas naturales de sus islotes definen laberintos de
remansadas aguas turquesas en los que la navegación a motor no
podría resultar más excitante. Llevamos una lancha cuya cubierta
está específicamente diseñada para el buceo y fuertemente
motorizada con dos fuerabordas Yamaha de 225cv, que empujan
nuestra lancha de 12 metros a más de 40 nudos.
Aguas transparentes en
las Rock Islands.
El skipper
de nuestro barco que conoce la zona a ojos cerrados nos lleva por
algunos pasajes increíbles. En Palau las mareas vivas pueden
llegara tener cerca de 2 metros aunque normalmente tengan en torno
al metros de altura. Entre las diferentes zonas de islotes existen
extensos bancos de aguas tan someras que sólo pueden navegarse en
marea alta. Por esta razón los alemanes dinamitaron hace cerca de
100 años un canal que permite acortar la navegación entre dos
zonas sin tener que depender de las mareas. El conocido “German
Channel” forma una corta “autopista” de color cian brillante
que sorprende al ser navegado tanto en marea alta como en la
bajamar, cuando las aguas dejan aflorar las rocas que lo
delimitan. ¡El contraste de tonos azules en “German Channel”
es brutal!
Pero tanto
islote, rocas y mareas, dejan al descubierto escollos que además
pueden pasar fácilmente desapercibidos al no existir oleaje que
los delate. Por esta razón es más que conveniente tener un buen
patrón local que conozca estas aguas como la palma de su mano.
Cuando por la tarde el viento levanta algo la mar, podremos buscar
la navegación por el lado de sotavento para que las islas nos
protejan de la marejadilla.
Calas sorprendentes en
mitad de una lengua de arena blanca cuyo contraste llega a hacer
daño a la vista por su intenso brillo. Rincones perfecto para
parar a descansar y comer un buen almuerzo.
Millones de
medusas inofensivas
En algunas
islas sus rocas calcáreas están horadadas como un queso de gruyere
permitiendo el paso del agua marina al interior en donde en
ocasiones se forman pequeños lagos de agua marina con ecosistemas
tan sorprendentes como el del famoso lago de las medusas "Jelly
Fish Lake".
Se trata de
un lago habitado por una altísima densidad de medusas doradas que
han evolucionado durante miles de años hasta perder sus tentáculos
urticantes al no ser necesitados como defensa contra depredadores.
Por ello nos
decidimos a nadar entre ellas, tan fascinados como extrañados. El
agua muy clara está cerca de 30 grados, aunque nosotros preferimos
ponernos los neoprenos a pesar de saber que estas medusas no
pican. Es tal la densidad, que tienes que apartarlas suavemente
con la mano mientras nadas entre ellas. Las hay tan pequeñas como
la uña de un meñique, aunque la mayoría son del tamaño de un puño
y todas ellas nadan con la misma y pulsante cadencia.
A unos 5
metros de profundidad bajo la superficie habitan otro tipo de
medusas y en la parte más profunda del lago a 30 ó 40 metros las
aguas se hacen venenosas debido al sulfuro de hidrógeno, por lo
que no es muy buena idea buceas profundamente en ellas.
La aventura
comienza bajo el agua
Para muchos submarinistas, Palau ofrece el mejor buceo
del mundo y uno de los entornos más bellos del planeta. En la
mayoría de los puntos de inmersión la visibilidad es cristalina.
En Palau la
apabullante belleza del mar y de sus islas representa una parte
del total. Lo mejor está por descubrir bajo la superficie del mar.
Palau es sencillamente uno de los mejores lugares del mundo para
el buceo con botellas. Cada inmersión es distinta. Cada buceo
único. Destacan algunos puntos de inmersión como son Blue
Corner, German Channel, Blue Hole, Big Drop off, Ulong Channel, y
Pelelui, pero lo cierto es que todas las inmersiones en Palau
son fabulosas.
Ciertamente
no es un lugar para principiantes, dadas las fuertes corrientes
que encontraremos en muchos de sus puntos de inmersión, pero
también existen paredes perfectas incluso para los menos
experimentados. Y de hecho es en estos jardines de coral en los
que podremos encontrar fauna muy bella para los amantes de la vida
en miniatura, para los aficionados a la fotografía y al macro.
Pequeños nudibranquios de brillantes colores o minúsculos
cangrejos de menos de un centímetro como el que habita en las
hojas de los crinoideos.
El plato
fuerte de las inmersiones de Palau reside en los pelágicos.
"German Channel" ofrece en
unos de sus extremos una estación de limpieza de mantas en la que
se dan cita tan majestuosos animales casi todos los días. Basta
con permanecer arrodillado en el fondo durante algunos minutos
para que estas acaben por acudir y sin ningún pudor se pongan a
hacer "loopings" delante nuestro. ¡Qué espectáculo!
Otra fantástica inmersión. Las
mantas nos pasan haciendo loopings a menos de un metro de
distancia... Uahuuu
Pero la más
famosa de todas ellas es "Blue Corner"
en donde no queda más remedio que.… ¡alucinar!
El agua es
transparente como el cristal, lo que permite una
visibilidad sobrecogedora. Te sientes en un auténtico escenario
tridimensional en el que evolucionas a placer.
La plataforma
submarina situada a unos 15 de metros de profundidad se hunde
bruscamente en una pared sin fondo que muestra el gran azul. Como
la corriente es fuerte en este cortado submarino, lo común en este
punto de inmersión es descender con un gancho de corriente que te
permite permanecer estático sujeto a cualquier saliente rocoso y
extático ante el panorama que transcurre frente a nosotros.
Tiburones punta blanca y grises de arrecife pasan por decenas a
literalmente menos de un metro nuestro. Verlos tan de cerca, tan
nítidamente, tan “en directo” es impactante. Aprecias
cuidadosamente la perfección de su anatomía, la potencia de sus
aletas, la estilización de sus cuerpos hidrodinámicos. Te miran
despreocupados con su ojo de pupila alargada como si fuéramos
"aliens" en su secreto mundo.
Pero en Blue
Corner la diversión continúa, pues mientras admiras el desfile de
tiburones, entre ellos nadan también a contracorriente atunes
plateados de cerca de un metro, a la par que un gran pez ballesta
mordisquea un fragmento de coral. La densidad de vida es
fantástica y entre tiburón y tiburón pasea de vez en cuando un
gran napoleón verde claro. Mientras tanto a nuestra espalda el
espectáculo continúa y a poca distancia un enorme pez ángel se
entretiene entre los fondos coralinos, cuando de repente te giras
de nuevo y te das cuenta que acabas de perderte a un nuevo punta
blanca que ha pasado frente a ti ¡a escasamente 60 centímetros!
Verlos de cacería es muy
emocionante. Puntas blancas, puntas negras, tiburones grises...
Una buena variedad que se pasea ante nuestras narices ignorándonos
de la forma más absoluta.
En
"Blue Wall", la pared justo
antes de Blue Corner nos topamos con otra inmersión de libro. Se
trata de un buceo de deriva bastante rápido mientras no sabes a
donde mirar pues ocurren demasiadas cosas al mismo tiempo. Varios
tiburones avanzan bajo nosotros mientras una enorme morena 3
metros me pasa zigzageando despreocupada a menos de un metro sin que finalmente
ninguno de los dos nos prestemos demasiada atención. Demasiados
acontecimientos, demasiada vida junta. Miras arriba y abajo, giras
a un lado y a otro, y continuamente te sorprendes por distintas
escenas que se desarrollan simultáneamente. ¡Es un paraíso
submarino!
"Blue Hole" es otra
inmersión más que aconsejable. El barco te deja encima del
arrecife, y nadas por superficie sobre una plataforma coralina de
sólo 2 metros de fondo.
De repente… un agujero en mitad del
arrecife de coral. Una chimenea azul oscuro de unos 5 metros de
diámetro que se precipita a la vertical hasta los 25 metros de
profundidad. Mientras bajas el espectáculo es de ciencia ficción
al observar las diferentes columnas de burbujas de los otros
buzos.
Abajo una enorme catedral en cuyas paredes encontramos
ostras luminosas que emiten pequeños hilos de luz de neón. Y en el
fondo de la catedral nos asomamos por una larga falla en la roca
por las que se puede seguir bajando practicando espeleo buceo.
No
entramos por ellas pues llevamos Nitrox en las botellas y el
profundímetro ya se acerca a los 30 metros, zona próxima al límite
de toxicidad del oxígeno al bajar con Nitrox. La catedral ofrece dos amplias salidas
por las que se cuelan chorros de luz azul desde la superficie. La
cueva es bellísima y al salir de ella el espectáculo de vida
continúa….
Otra
inmersión maravillosa es la de la cueva de “Chandelier” y no sólo por la espectacularidad de las formaciones interiores. La entrada submarina se encuentra a 5
metros de profundidad y nada más acceder llegamos a una cavidad en
la que es posible salir a superficie y respirar.
A todos lados
contemplamos enormes estalactitas de un metro de diámetro y se
contempla con fascinación los rayos del sol azulados por el agua
marina que penetran por debajo. Nos volvemos a sumergir y pasamos
a una segunda cámara en la que también es posible respirar, y así
hasta llegar hasta la cuarta en donde ya a penas se ven los rayos
solares.
Chandelier es tan impactante al bucearla como al flotar en
sus piscinas interiores. Al fondo de la cuarta cámara, la cueva
continúa pero para ello habría que abandonar el equipo de buceo y
avanzar a pié.
Al salir
fuera de la cueva nos espera la mejor sorpresa. A pocos metros de
la cueva y a solo 3 ó 4 metros de profundidad existe un arrecife en
donde habita el escurridizo pez mandarín que tanto cuesta
observar. Nuestra sorpresa es grande al encontrarnos con una gran
“ciudad” de peces mandarines. Lejos de ver un solo ejemplar y de
forma esporádica, ¡tenemos siempre 3 ó 4 a la vista! Su famosa
vistosidad nos fascina durante 40 minutos.
El esquivo pez mandarín puede
observarse en muy pocos lugares del planeta. En Palau vimos
colonias de ellos y a veces teníamos 4 o 5 a la vista de forma
simultánea. ¡Un privilegio que supimos apreciar!
Pecios
interesantes
Palau
también es famoso por ofrecer varias decenas de interesantes
inmersiones en barcos hundidos algunos de ellos de la segunda
guerra mundial. La inmersión en el gran "Iro
Maru Wreck" es sorprendente por la importante
eslora del buque y la posibilidad de adentrarse en el cuarto de
calderas y observar los enormes propulsores stirlings. El barco
está habitado por grandes ostras y muchos cardúmenes de peces si
bien no los podemos disfrutar en esta ocasión por la mediocre
visibilidad.
Un Zero Japonés de la segunda
guerra mundial. Está perfectamente conservado, pues tanto el
fuselaje como los planos son de aluminio que no se oxida en el agua del
mar.
Palau; Vida por
todas partes
Lo
inesperado está a la orden del día. Las inmersiones más tranquilas
te sorprenden, como la realizada en
"Virgin
hole"
en la que buceando en un agua tan transparente como el cristal
contemplamos como nos pasa de largo un grupo de 20 ó 30 jóvenes
napoleones nadando distraídamente pegados a la pared. En otras, de
repente observamos como 6 u 8 tiburones grises nos pasan nadando
por debajo a bastante velocidad y sin más comienzan a subir por la
pared del arrecife con cierta excitación en una evidente acción de
cacería sobre los densos cardúmenes que tenemos a nuestro
alrededor. Y al poco rato en esta misma inmersión pasamos al lado
de un enorme y denso banco de ballestas naranjas que destacan con
gran belleza de la pared submarina.
No podemos
dejar de comentar una de las mejores inmersiones de Palau en el "Canal
de Ulong". Se trata de una inmersión de corriente
muy espectacular y divertida. Comienza con una pared tan llena de
vida como las de Blue Corner. Observamos cardúmenes de barracudas
de mediano tamaño, tortugas, y mucha vida. Poco a poco nos vamos
encajonando en el canal con unos 15 metros de fondo que se va
estrechando a medida que aumenta la corriente. Te dejas llevar a
gran velocidad mientras continuas observando todo tipo de peces a
nuestro alrededor. Al final, la corriente cede en mitad de un
fondo arenoso en donde observamos densos jardines de anguilas que
fácilmente podemos estudiar muy de cerca a poco que nos quedemos
inmóviles y contengamos un poco la respiración.
Un jardín de anguilas en mitad
de un extenso arenal en el canal de Ulong. Un sitio fantástico
para disfrutar de un buceo único en el mundo y sumamente
espectacular por su paisaje submarino, y su abundante vida.
Disfrutar las
islas
Las aguas
turquesas nos conducen en muchas ocasiones a bahías escondidas
y secretas en donde encontramos guarderías de tiburones y rayas. Con
una motora de poco calado es posible alcanzar rincones increíbles.
Y entre buceo y buceo descubrimos escondites inhabitados de tonos
esmeralda en los que permanecer totalmente aislados de cualquier
signo de civilización. En muchas islas se han construido
cobertizos al borde de la playa en donde arribamos para comer y
descansar a la sombra.
En la selva
encontramos sabrosos bananeros y otros frutales, aunque es mejor
no adentrarse pues si bien parece ser que son huidizos, lo cierto
es que podríamos encontrarnos con cocodrilos de agua salada. Pero
el peligro es pequeño pues los mayores ejemplares ya fueron
desgraciadamente cazados por su cara piel.
El paisaje
parece en ocasiones irreal y observamos una fina línea de arena
blanca justo entre aguas de diferentes tonalidades. La
contrastada belleza continúa todo a nuestro alrededor y nos
imaginamos la gozada que tiene que ser navegar por estas aguas en
moto de agua, aprovechando todos los recovecos, descubriendo todos
sus estrechos pasadizos.
Palau es
ciertamente un paraíso en el que perderse por una temporada y
disfrutar unos de los mayores regalos que pudiera habernos hecho
la naturaleza.
Donde
Comer
Además
de los restaurantes de cada hotel y resort existen bastantes
sitios para cenar en Koror, de los cuales aconsejamos sin
lugar a dudas el "Emeimalai" que si bien no es más que un
restaurante de aspecto medio, la comida ofrecida es
exquisita y muy barata. Hay
nombres de comidas locales, japonesas y otros rincones
asiáticos, y es prácticamente imposible saber que es lo que
vamos a pedir, aunque si pedimos el pescado del día,
acertaremos siempre pues la cocina es exquisita.
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República de
Palau: Ficha Técnica
Lengua
Palauano e Inglés.
Localización:
Latitud
7° 30'
Norte , 133° 30' Este
20.000
Habitantes
Formada por más de 300 islas de
origen volcánico y coralino
Clima tropical con una
temperatura media de 27ºC.
Horas de
diferencia con España: 8 horas.
Todas las
tarjetas de crédito son aceptadas.
Religión 75% cristianos.
Los tres grandes clubs de buceo de Palau son NECO Marine (www.necomarine.com),
Fish 'N Fins (www.fishnfins.com), y Sam's Tours (www.samstours.com),
siendo la segunda la que pudimos conocer a fondo y para nuestra
total satisfacción. Si lo suyo es un lifeaboard puede consultar www.oceanhunter.com, www.aggressor.com, o www.expeditionfleet.com/liveaboard_diving/palau/.
Palau es el auténtico “Serengueti” submarino de nuestro planeta,
con 700 especies de corales y 1.500 especies de peces. Una enorme
biodiversidad que encontraremos en sus 300 islas y plataformas
submarinas. La época de limpieza es de febrero a abril.
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